Laura Cordoba Artes Visuales

mirando mirando




Cuando nos encontramos ante él y su obra, comprendemos que Lucas Stoessel es un auténtico artista. Y además es un artista auténtico. Desde perspectivas extrañas, y ocupando siempre el centro de la composición, coloridos personajes protagonizan sus pinturas y nos invitan a formar parte de sus escenarios. Es la atmósfera cotidiana, y la mirada cómplice y hasta compinche de estos seres que ya sea bailando, sentados o con nariz de payaso, nos incluyen y nos invitan a ser parte del juego. Y la fotografía, que es la génesis, la semilla madre de estas creaciones, pasa a estar deliciosamente subordinada a lo pictórico.
Hablar de una paleta audaz, y de colores alegres sería no hacer honor a los conocimientos que poseo del tema, pero lejos está esto de ser una crítica con todas las de la academia. De repente te encontrás con que te duele la cara y advertís que hace unos minutos estás paseando por la muestra con una sonrisa pintada: Hay cosas que nos movilizan y nos conmueven, y no siempre logramos descifrar por qué sucede esto. A veces nos rendimos y dejamos de buscar explicaciones. A veces nos resulta llamativo ver que una artista se parece tanto a su obra. Que parece decir es todo lo que tengo, es todo lo que hay y sin embargo promete más. Deja ver un continuará.

Ayer tuve la oportunidad de pasar por el Camarín de las musas (Mario Bravo 960), donde está exponiendo sus pinturas hasta el mes de febrero. Visita obligada, y recomendada, si se pasea por el barrio de Almagro.